21 feb 2013

Manifiesto del inconformismo



La expresión inerte ha jugado sucio,
te ha mecido en el silencio ineludible.
Tus ojos han olvidado el horizonte,
mientras tus manos reposan en cenizas.

La voz que arrastra temores, el impulso que da la vida,
el latido que te vio nacer, los sentidos que proceden intactos,
todo aquello se ha esfumado
junto a la libertad de desvanecer ataduras.

El vientre grita libertad,
recuerda una mañana sin miedos,
una mirada infinita, unos pasos inmortales,
recuerda que éramos más que un escalafón

Hablo desde aquí,
desde el carente espacio donde perdimos la esperanza,
desde la prisa mutilada, desde la noticia desparramada,
hablo desde donde hieren las letras cotidianas.

¿Estas serán las letras de mil mañanas,
llenas de sueños entorpecidos,
y almas sepultadas en la rutina?

Declino una vida en el espejo distorsionado,
en un camino ilustre pero olvidado.
Rechazo las ganas que no se superan,
el silencio que vende cada bosquejo,
la realidad envuelta de costumbre.

Espero no esperar en demasía,
para contar la historia de cabeza,
para recordar las decisiones insólitas,
 para revivir el sentido de la vida.

                                                                         Alhe7